Estación Esperanza

“El futbol mexicano es un negocio que depende de la oscuridad en las decisiones y la falta de rendición de cuentas; un espectáculo donde la parte visible es pobre (perdimos otra vez) y la parte oculta formidable (los dueños ganaron más)”
—Juan Villoro

Cada 4 años, el mundo vive la gran fiesta deportiva del mundial de futbol. Un momento de alegría y de profunda ilusión, tanto para futbolistas como para la afición, quienes durante el juego nos volvemos directores técnicos, expertos que gritamos las instrucciones desde la comodidad del sillón y que reprochamos los intentos fallidos de gol de nuestro equipo. Sin embargo, también existe una frustración colectiva causada por el famoso e inalcansable 5° partido al que nunca ha tenido acceso nuestra selección.

Las causas sondiversas pero parecen tener una raíz común: La corrupción. Nuestro Pdte. López Obrador, lo señaló recientemente en una de sus conferencias: “Nos dieron momentos de alegría, de felicidad, de esperanza, y como suele pasar, hay mucha afición para tan poco desarrollo deportivo, en esta disciplina”.

Y es que para nadie es un misterio lo que pasa en la Federación Mexicana de Futbol (FEMEXFUT) siempre ligada a los intereses económicos que mueve la pasión por el futbol. Por ejemplo, existe la multipropiedad por parte de los dueños de los equipos, quienes llegan a poseer más de una franquicia, lo que puede causar un conflicto de intereses. El problema es tal, que un 45% del futbol mexicano está bajo dicho esquema. Así mismo, Grupo Televisa, parte del duopolio televisivo más importante del país, es el dueño de la Selección Mexicana que siempre ha sido manejada como un producto del marketing.

En nuestra liga, existen condiciones que demuestran que se antepone el negocio y el dinero antes que el desarrollo deportivo de la disciplina. Los ejemplos más claros, son: La burbuja del mercado del futbol con altísimos costos por los jugadores, lo que impulsa la importación de deportistas sudamericanos y la falta de oportunidades para la conformación de canteras propias y un torneo de futbol sin seriedad, donde no importa recolectar la mayor cantidad de puntos, sino ganar la liguilla -donde se enfrentan 12 de 18 equipos-; donde los directivos decidieron eliminar el ascenso y descenso, consolidando así, un sistema ideado para fomentar la mediocridad.

Qatar 2022, quedará en la memoria como el 1er mundial en el que México fue eliminado en 1ª fase, una simple consecuencia a las acciones emprendidas por nuestra liga. Como lo ha señalado el Pdte. Andrés Manuel: “Lo que se tiene que hacer, por respeto a la gente, es formar buenos futbolistas, que se puedan crear escuelas y que se destinen recursos con ese propósito, pero eso corresponde al sector privado, también si nosotros tenemos que ayudar lo hacemos, sobre todo por el entusiasmo y el respeto que merece la gente».